Viaje a Cuenca. Fin de semana de escapada rural

Escapada rural en Cuenca, el 11 y 12 de febrero de 2012
Canción del vídeo: Levels de Avicii ● Ver en Youtube

Casi sin pensarlo y de manera expontánea, hablando con una amiga comentábamos de hacer una escapada fuera de Madrid. La idea era desconectar del estrés, edificios, coches, metro, gente y demás términos característicos de la gran ciuda, así que decidimos hacer algo orientado a la natrualeza. La respuesta era clara: un poco de campo, de sierra, de verde natural.

En dos días ya éramos 10, en una semana 14, y finalmente entre varias propuestas el candidato final resultó ser como destino alquilar una casa rural en la provincia de Cuenca, a unas dos horas y media desde la capital española.

El nacimiento del río Cuervo: Porque lo mejor de los viajes son las anécdotas.

Empiezas a decir a gente que vas a Cuenca y todos piensan en lo mismo: El nacimiento del río Cuervo. Ya sea por fotos, por porque te lo ha dicho el amigo de un amigo o porque ya han estado allí, queda claro que es una de las principales atracciones de la provincia.

Lo mejor de todo es que ni si quiera pude conocer si la leyenda era cierta. Caminito del nacimiento, a los 15 minutos de entrar en una carretera estrecha sin cobertura, sin rastro alguno de humanidad, empiezan a aparecer trozos de carretera nevada, trozos que cada vez parecen ser más largos y más continuos hasta que, en un último aliento, los pobres coches empiezan a patinar en zonas heladas siendo imposible el poder avanzar.

De buena manera, tras poner un par de cadenas, mucho empujar y mucha mucha calma, conseguimos sacar los coches del terreno deslizante, así que decidimos parar a la vuelta en una pequeña zona donde había un puente romano junto a la carretera, señalizado como construcción histórica, sobrepasando un pequeño río.

Lo mejor de todo es que avanzando por la senda del río descubrimos que toda la superficie se encontraba congelada hasta llegar a una preciosa cascada también congelada por la que pasaba el agua por debajo. Una vista increíble que podéis ver en el vídeo de la cabecera.

Casa Rural en Ribagorda: Celebración en la casa Poyatos

El nombre de la casa es toda una incógnita (apellido de la casera). Alquilamos la casa en un pequeño pueblo llamado Ribagorda durante la noche del sábado para “descansar” y “reponer fuerzas” para el domingo. La casa dispone de 14 camas y está completamente preparada con tres baños (jacuzzi incluido), calefacción y chimenea. El precio es de 16 euros por persona y noche. (Enlace a la casa)

La Ciudad Encantada: Una ruta por senderos con piedras de extraña forma

A unos 30 kilómetros de la capital (creo recordar) se encuentra este espacio turístico. La entrada al lugar vale 3€ y, una vez dentro, disponemos de unos 3 kilómetros a través de los cuales veremos grandes rocas con formas identificables. No sé cómo será en verano o primavera, pero en pleno invierno el lugar tiene vistas preciosas con la mezcla de colores verdes, marrones y blancos gracias a la nieve.

Ventano del Diablo: Aire puro y afilado desde un bonito mirador

A unos 6 o 7 kilómetros de la Ciudad Encantada se encuentra este peculiar mirador apartado a un lado de la carretera que, según me dijo un hombre de la zona, tiene ese nombre por la acuchilladora brisa que hace allí, sobre todo en estas fechas.

El mirador se encuentra en lo alto de uno de los laterales de una senda bordeada por dos especies de cordilleras de montañas (no recuerdo si sobre dicha senda pasaba el río), a ser posible recomiendo ir en otra época del año o, en caso contrario, ir muy abrigado.

Casas Colgadas: Finalizando el viaje en la capital de la provincia

La provincia de Cuenca tiene vistas y sitios espectaculares. Sinceramente, no me imaginaba que me fuera a gustar tanto ya que no es una ciudad famosa por nada en especial excepto dichas casas colgantes (al menos no para mí), pero la capital tampoco se escapa de tener este gran rincón con encanto. Estas casas tienen dicho nombre debido a que están construidas al borde del abismo de un precipicio.

Creo que son más conocidas como “casas colgantes”, pero el nombre real que tienen es el indicado en el título de esta última parte del post.

Más en el blog Secret Garden

Si os habéis quedado con más ganas, os recomiendo echarle un vistazo al post sobre el mismo viaje realizado en el blog Secret Garden, donde incluso tenéis más detalles acerca de las rutas a seguir. (Ver enlace)